jueves, 3 de septiembre de 2009

Arrástrame al Infierno

Pero ¡qué brincos me hizo pegar esta peli! En general, el principio de una película marca la pauta de cómo se llevará a cabo. En este caso empezó súper bien pero al final decayó, como que se les terminó el presupuesto porque los efectos del principio no se ven igual que los del final, pero en fin. La verdad valió la pena verla.

Disfruté ver a Justin Long (el chavo que sale en Duro de Matar 4.0 como experto en computadoras; y en A él no le gustas tanto). No sé muy bien porque me cae tan bien, pero fue bueno verlo en una peli donde no está protegido por grandes celebridades. Aquí, uno de los protagonistas es él y, creo yo, el más conocido.

Si te da asco fácilmente...ni la vayas a ver, porque tiene dos que tres cosas súper asquerosas y, lo peor de todo, es que casi todo el tiempo terminan en la boca de la protagonista.

La historia es un poco predecible, pero no le quita su chiste. Están super bien hechos los momentos típicos en que uno dice "hay viene algo que me va a hacer brincar", porque lo manejan de manera que le quitan esa tensión y te olvidas de que te iban a espantar, te relajas y ¡zaz!, hasta gritas de tan en la baba que te tenían. Hubo momentos en que todos los asistentes nos reíamos al mismo tiempo de nosotros mismos, de los saltos que dábamos en nuestras butacas y de los gritos que soltábamos.

Le pongo 3 palomitas.

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