jueves, 7 de mayo de 2009

¿Qué más puedo pedir?


Hace seis años y medio que llegue al pequeñísimo departamento donde vivo. Poco a poco he ido adaptándome al poco espacio que tengo. Con un poco de ingenio he logrado caber. Lo que nunca he podido hacer es adaptarme al rumbo. Definitivamente extraño el lugar donde crecí y donde viví casi toda mi vida. La colonia donde me se mover con tranquilidad, donde si me preguntan por las pizzas, las tortas, los tacos, la tiendita de la esquina, el super, etc., se a la perfección donde está, como llegar, el horario, si es seguro ir a tal o cual hora. El lugar donde sé que si se estacionan en la calle saldrán y sus carros seguirán ahí, completos. El rumbo donde sé que cuando salgan no sólo no los van a asaltar, sino que si llegara a pasar, los vecinos ayudarán de alguna manera o de mínimo avisarán a las autoridades.

Durante los seis años y medio que llevo viviendo en este departamentito he soñado con conseguir cambiarme a MI rumbo, sin importar si conseguía un lugar tan o más chico que éste, al fin ya sé que me las arreglo para caber.

Hoy no sólo sé que mi sueño está caminando para hacerse realidad, encima de todo el lugar al que me cambiaré es de casi el doble de tamaño que donde vivo actualmente. Podré moverme libremente, no sólo en mi espacio sino también en la calle; podré invitar a mis amigos con la confianza de que nada malo pasará y con la confianza de que tanto ellos como yo podremos movernos dentro de mi casa sin tener que pisarnos los callos.

¡Y ni que decir de cocinar!, tener todo a la mano, sin tener que mover la licuadora para que quepa la cafetera, poder abrir el refrigerador sin tener que pedirle al otro que está en la cocina que se salga para poder hacerlo... ¡wow!

Dos meses, dos meses han dicho que tardará en hacerse realidad. ¡Dios quiera que todo salga bien y así sea! De mientras, tengo aproximadamente 60 días para imaginar todo tipo de cosas hermosas, reuniones, platillos que cocinar, muebles nuevos que comprar que me hacen falta y aquí no caben, en fin. ¡Ya estaré informando cuando la mudanza se esté haciendo!
No será la casa de los sueños de muchos, con su reja blanca y demás, pero ¡sí será el departamento de mis sueños y en mis rumbos! En cuestiones de vivienda ¿Qué más puedo pedir?

2 comentarios:

  1. Isa! me da muchísimo gusto tu cambio, estoy segura que ya es una realidad. Lo que necesites ya sabes (mudarse es una lata y tu me echabas porras), y por supuesto que tenemos que hacer el opening house. Créeme que te entiendo perfecto, volver a tus rumbos significa tanto como volver al "hogar dulce hogar"

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  2. "Ya me viiiiiiii" cenando en tu depa y echando chisme y riéndonos!
    Estás a nada de hacerlo! eso sin duda motiva, y mucho!

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